La belleza es una característica de un ente real, imaginario o ideal cuya percepción constituye una experiencia de placer, revelación de significado, o satisfacción. En este sentido, la belleza proviene de manifestaciones tales como la forma, el aspecto visual, el movimiento y el sonido, aunque también se la asocia, en menor medida, a los sabores y los olores. En esta línea y haciendo hincapié en el aspecto visual, Tomás de Aquino define lo bello como aquello que agrada a la vista (quae visa placet).
La percepción de la "belleza" a menudo implica la interpretación de alguna entidad que está en equilibrio y armonía con la naturaleza, y puede conducir a sentimientos de atracción y bienestar emocional. Aunque la belleza "está en el ojo del observador", parece que tiene algunos elementos comunes en el ser humano y que es resulta más bello aquel que es percibido en equilibrio, que muestra ritmo en sus acciones y se muestra atento para responder adecuadamente en su entorno. Así pues la clave de la belleza procede de la atención, el equilibrio y el ritmo, no dependiendo exclusivamente de cualidades innatas sino también de acciones y conductas que descubren la belleza.
El Coaching estético, en este sentido, es aquel que entrena la capacidad de la persona para obtener influencia y éxito a través de la belleza mediante el manejo de la atención, el equilibrio y el ritmo de la persona.
¿Tu vida es bella? ¿Has pensado en cómo te perciben los demás? ¿Eres agradable a la vista, al oído de los otros? ¿Te huyen o se acercan a tí? Antes de plantearte cualquier objetivo, procura resultar bello a los demás, bello en lo personal, bello en lo profesional. ¿Cómo te presentas ante los demás? Esta es la cuestión.
ResponderEliminarDe nada sirve tener buenos principios, buenos contenidos, si no tenemos un bello envoltorio para presentarlos a los demás. El coaching estético te ayuda a conseguir esa forma, a través de la atención, el equilibrio y el ritmo, para obtener influencia y conseguir tus objetivos.
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